Neumococo
¿Qué es?
La enfermedad neumocócica es una infección causada por la bacteria neumococo. Estas bacterias viven en la nariz y la garganta de personas de todas las edades. El neumococo comúnmente infecta el oído medio y los senos paranasales (los espacios pequeños entre los huesos que rodean la nariz). Aunque son menos comunes, estas bacterias también pueden infectar los pulmones (neumonía neumocócica), el sistema nervioso central (meningitis neumocócica) y el torrente sanguíneo (bacteriemia o sepsis). Este tipo de infecciones son más graves. Los síntomas dependen del área del cuerpo que esté infectada. Afortunadamente, existe una vacuna que protege contra la enfermedad neumocócica.
¿Por qué es importante la vacuna?
Las infecciones neumocócicas son las infecciones bacterianas invasivas más comunes en niños y niñas en los EE. UU. La enfermedad puede afectar a cualquier persona. Los niños y niñas menores de 2 años se encuentran entre los que corren mayor riesgo; otro grupo de riesgo incluye adultos mayores de 65 años. A menudo, las infecciones neumocócicas son leves. Otras veces, la enfermedad puede provocar pérdida de audición, daño cerebral o incluso la muerte. No hay forma de determinar qué tan grave será una infección.
Hace años, las infecciones neumocócicas se trataban con antibióticos. Con el tiempo, la enfermedad se ha vuelto resistente a los antibióticos, esto significa que la bacteria ha cambiado. Debido a la resistencia a los antibióticos y al riesgo de infección grave, es importante seguir las recomendaciones de vacunación de rutina del CDC para las vacunas neumocócicas.
Progreso
Las tasas de enfermedad neumocócica han disminuido drásticamente desde que se introdujeron las vacunas a principios de la década de 2000. De hecho, desde 1998 hasta 2021, el número de casos disminuyó 95% (artículo en inglés). Antes de las vacunas neumocócicas, había alrededor de 700 casos de meningitis (infección cerebral), 17,000 casos de infección del torrente sanguíneo y 200 muertes atribuidas a la enfermedad neumocócica cada año. Hoy en día, existen dos tipos de vacunas neumocócicas que previenen múltiples cepas de la enfermedad.
Recomendaciones de vacunas
Las vacunas protegen contra 23 cepas de bacterias neumocócicas. Estas cepas causan la infección más grave. Las vacunas disponibles son la PCV15, la PCV20, la PCV21 y la PPSV23. La edad y los factores de riesgo de enfermedad determinan qué vacuna se administrará. Los niños y niñas deben recibir la PCV15 o PCV20 en 4 dosis a partir de los 2 meses de edad, cuando tienen mayor riesgo de contraer enfermedad neumocócica. Las dosis se recomiendan de la siguiente manera: 1 dosis cada uno a los 2 meses, 4 meses, 6 meses y 12 a 15 meses. La vacuna PPSV23 se puede administrar a niños y niñas con ciertas condiciones de salud. No se recomienda la PCV21 para los niños.
Efectos secundarios
Las vacunas, como cualquier medicamento, pueden provocar efectos secundarios (también conocidos como "reacciones adversas"). La mayoría de los efectos secundarios son leves y desaparecen en unos pocos días. Los efectos secundarios comunes incluyen fiebre, dolor de cabeza o dolores corporales y cansancio. También pueden incluir enrojecimiento en el lugar donde se aplicó la vacuna. Los efectos secundarios son normales. ¡Incluso pueden ser una buena señal de que el sistema inmunitario está trabajando para desarrollar anticuerpos que combatirán futuras infecciones!
En el caso de las vacunas antineumocócicas, los efectos secundarios también pueden incluir un mayor riesgo de convulsiones causadas por la fiebre en niñas y niños pequeños si se administran al mismo tiempo que una vacuna antigripal inactivada. Pídale al médico de su hijo o hija más información sobre este riesgo.
Recuerde, las vacunas se estudian continuamente y son monitoreadas cuidadosamente por seguridad. Las investigaciones continúan demostrando que las vacunas son seguras y que los beneficios superan los riesgos. El riesgo de sufrir una reacción alérgica grave a una vacuna es poco común (aproximadamente 1 en 1 millón). La opción de no vacunarse tiene muchos más riesgos y puede llevar a contraer una enfermedad potencialmente mortal.
Hable con su médico si tiene alguna pregunta o inquietud sobre los efectos secundarios de la vacuna. En caso de una reacción alérgica grave, llame al 9-1-1.